Versión Escénica estrenada en 2004
Vuelve de esta manera a la Cartelera Teatral de Buenos Aires, la clásica historia del pintoresco Conventillo de Villa Crespo en donde se dan cita los personajes típicos y característicos de la oleada inmigratoria de principios del siglo pasado, que fueron poblando los barrios porteños sumándose a los personajes netamente locales, para dar lugar a un paisaje por demás atractivo, pintado con singular maestría por uno de los autores más significativos del género.
Así conviven y se entremezclan, un italiano encargado del Patio del Conventillo, gallegos, turcos, una percanta, malevos, curiosos y entrometidos y por encima de todos la humanidad, la emoción, la alegría y el sabor de Buenos Aires guardado en un rincón del corazón.
Dirección General: Adrián Di Stefano.
"Esperando la Carroza" es una Comedia Teatral del Autor uruguayo Jacobo Langsner, pero que por lo particular de su temática, se fue transformando con el transcurso del tiempo como se la fue clasificando: en un "Grotesco Costumbrista", para ocupar el merecido reconocimiento de pasar a ser, un “Clásico Rioplatense”. Es la historia de tres hermanos (Jorge, Sergio y Antonio) con sus respectivas esposas (Susana, Elvira y Nora) que no quieren hacerse cargo de su madre octogenaria (Mamá Cora); es decir nadie se quiere hacer cargo de la anciana.
La acción transcurre en casa de Sergio y Elvira un "placido domingo familiar" (a decir de Antonio) que toma exactamente el rumbo opuesto a lo que Antonio sugería: Mamá Cora desaparece y todos la dan por muerta. Entonces, al aparecer el cuerpo de una anciana solo reconocida por sus zapatos, la velan en esta casa (el cuarto de la Matilde exactamente, la hija de Sergio y Elvira), siendo que por un "error" no es de quien creen, sino de una desconocida (resultando ser de una húngara exactamente) dado que Mamá Cora está viva y aparece al final de la obra para darle un cierre de características desopilantes que no deja de rayar con lo grotesco y reflexivo. Mientras tanto, se tejen y destejen entre hermanos, cuñadas y cuñados, vínculos y asociaciones que serán sencillamente desastrosos. Saldrán a luz celos, recelos, envidias, críticas y engaños, sin ningún tipo de miramientos de una forma directa y frontal, desnudando entretelones de una singular familia dentro de una sociedad controvertida y contradictoria.
Dentro de las características del Género Grotesco, en que se enmarca esta obra, pueden detallarse particularmente los personajes provenientes de clases populares y/o bajas, en que la estética de los mismos son exageradas. Los mismos son animalizados profundizando sus psicologías dentro del marco de una fuerte crítica social a veces sutil, a veces desgarradora, para desnudar el tema básico de la ausencia del dinero como contrapartida de quien lo pudo atesorar, y las consecuencias que con lleva, relacionadas con los fracasos, el desamor, la disolución familiar, la corrupción y la humillación. No tan destacados en esta Comedia devenida en Grotesco, los personajes que habitan el Género del Grotesco, son inmigrantes en su mayoría italianos, en donde el lenguaje que utilizan es una mezcla de términos vulgares y el lunfardo típicos de un habla ítalo-criollo, ubicando su accionar en un espacio escénico propio del entorno familiar propio de su delicada situación económica.
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